La muerte de nuestra cultura

La muerte de los conglomerados de comunicación como las editoriales, los canales de noticias, prensa activa corren por arenas movedizas, desde la revolución de internet la capacidad de comunicar se diluye entre cada persona conectada a la red. Para mantener estas esferas, las instituciones se encargan de promover contenido basura, conmocionando a los televidentes con el último reality, por ejemplo.

El mecanismo de producción de contenido, si bien, aún conserva una ilustración de la realidad y trata de graficar las cuestiones cotidianas. La televisión en Chile, con alrededor de 50 años, al menos en la clase pobre, en algún momento apuntó a educar y entregar información de calidad a las personas, paulatinamente se ha convertido en un dispositivo de reproducción de contenido fetiche; promotor de la moda, vitalización del cuerpo como bien de consumo, discusiones tibias de política en programas de debate con formato late, un salvaje bombardeo de publicidad en teleseries con la dueña de casa como objetivo.

Las redes sociales en internet aparentemente conglomera a los detractores, proporcionando libertad en contenido, aunque aparente, pues es contenido plástico, líquido, con período de obsolecencia. La capitalización abunda en la red y no sólo en las campañas de publicidad, como adwords, o facebook ads, entre los otros; sino porque el contenido que reproducimos responde también a estructuras profiteables. Tal como el trabajo como redactor freelance, no lo transforma en una expresión de nuestra cultura y experiencia, sino a meros modos de reproducción de contenido consumible. Cuál es el problema entonces?. La cuestión es que se nos despoja de nuestra identidad cultural histórica, una de las aristas que conforman el correlato de nuestra identidad personal, configurado con nuestras emociones, recuerdos, historia. Siendo reemplazada, por emociones, recuerdos e historia de faltos de calidad, porque el contenido no es expresión subjetiva, es la muerte a la cultura como la entendemos.

Desde hace días vengo con una idea en mente: con la configuración actual del internet (usuarios, plataformas, emisores de contenido, etcétera) estamos más que nunca sobre expuestos al acceso a la información pero esa sobre exposición no implica un aumento en el conocimiento general de la población. Pienso que una de las razones es la que mencionas, hay mucha basura, pero también, aunque el "trash" no fuese tanto, sería como intentar pasar un monster truck por un túnel exclusivo de livianos, o sea, que no significa que el ser humano absorbe todo lo que contempla.

Luego, el ser humano va a elegir lo "lite" siempre y nuevamente aunque hubiera sobre exposición positiva, ésta se desaprovecharía.

Nietzscheano escribió:aunque el "trash" no fuese tanto, sería como intentar pasar un monster truck por un túnel exclusivo de livianos, o sea, que no significa que el ser humano absorbe todo lo que contempla.

Luego, el ser humano va a elegir lo "lite" siempre y nuevamente aunque hubiera sobre exposición positiva, ésta se desaprovecharía.

Qué de qué? no me entero, traduce porfas

moebius escribió:La muerte de los conglomerados de comunicación como las editoriales, los canales de noticias, prensa activa corren por arenas movedizas, desde la revolución de internet la capacidad de comunicar se diluye entre cada persona conectada a la red. Para mantener estas esferas, las instituciones se encargan de promover contenido basura, conmocionando a los televidentes con el último reality, por ejemplo.

El mecanismo de producción de contenido, si bien, aún conserva una ilustración de la realidad y trata de graficar las cuestiones cotidianas. La televisión en Chile, con alrededor de 50 años, al menos en la clase pobre, en algún momento apuntó a educar y entregar información de calidad a las personas, paulatinamente se ha convertido en un dispositivo de reproducción de contenido fetiche; promotor de la moda, vitalización del cuerpo como bien de consumo, discusiones tibias de política en programas de debate con formato late, un salvaje bombardeo de publicidad en teleseries con la dueña de casa como objetivo.

Las redes sociales en internet aparentemente conglomera a los detractores, proporcionando libertad en contenido, aunque aparente, pues es contenido plástico, líquido, con período de obsolecencia. La capitalización abunda en la red y no sólo en las campañas de publicidad, como adwords, o facebook ads, entre los otros; sino porque el contenido que reproducimos responde también a estructuras profiteables. Tal como el trabajo como redactor freelance, no lo transforma en una expresión de nuestra cultura y experiencia, sino a meros modos de reproducción de contenido consumible. Cuál es el problema entonces?. La cuestión es que se nos despoja de nuestra identidad cultural histórica, una de las aristas que conforman el correlato de nuestra identidad personal, configurado con nuestras emociones, recuerdos, historia. Siendo reemplazada, por emociones, recuerdos e historia de faltos de calidad, porque el contenido no es expresión subjetiva, es la muerte a la cultura como la entendemos.

Buena reflexion aunque en ella hay algunas argumentaciones que no comprendo. La cuestion es que  Internet, la Red de redes,, las redes sociales, la comunicacion en tiempo real y virtual, y el largo etc, obedecen a un tiempo, y que ese tiempo, se mueve se ha generado  por la iniciativa capitalista global de un mundo globalizado en torno a grandes empresas que han visto en este campo enormes intereses fiancieros. O sea no es un devenir por las circunstancias de un juevo futuro mundial, si no que es orquestado

Nadie sta obligado atener un ordenador, ni a llevar un movil permanentemente, pero la sociedad gobernada por estos capitalistas te obligan indirectamente cuando por ejemplo en el banco te dicen que ya no te enviaran recibos en papel (Alegan la peregrina idea de proteger el medio ambiente) y que si quieres ver tu saldo bancario tendras que verlo on line.

Hay muchas razones por la que este nuestro tiempo no es así por casualidad, si no porque es un tiempo obligado, hecho a la medidad de los poderosos, y en donde el humilde se hace cada dia mas esclavo pero pensando que es mas feliz porque tiene mas medios informaticos y mas comodidad, cuando la verdad es que su vida intima y economica esta siendo gobernada en la distacia por agentes financieros.

Es interasante el tema, que da para mucho pero no tengo tiempo.

Saludos

Nietzscheano escribió:Desde hace días vengo con una idea en mente: con la configuración actual del internet (usuarios, plataformas, emisores de contenido, etcétera) estamos más que nunca sobre expuestos al acceso a la información pero esa sobre exposición no implica un aumento en el conocimiento general de la población. Pienso que una de las razones es la que mencionas, hay mucha basura, pero también, aunque el "trash" no fuese tanto, sería como intentar pasar un monster truck por un túnel exclusivo de livianos, o sea, que no significa que el ser humano absorbe todo lo que contempla.

Luego, el ser humano va a elegir lo "lite" siempre y nuevamente aunque hubiera sobre exposición positiva, ésta se desaprovecharía.

Hola Nietz,
No creo que sea algo indispensable que aumente el conocimiento general de la población.

Que aumente el saber humano es importante, pero no de la población. Para convivir se le debe enseñar lo indispensable para que sepa comportarse: propalar los nuevos estereotipos o paradigmas sociales a seguir y evitar que el ser humano pierda la capacidad de convivir junto a los otros 7 mil millones.

La narrativa es fundamental para formar y mantener una cultura. El ser humano se forma basándose en la narrativa, los animales no. Las culturas cambian con las formas de la narrativa: miles de años fue oral, luego escrita y ahora en la red. Se està formando una nueva cultura; muere esa que nos acompañò desde nuestro nacimiento y nace una nueva. Las narrativas que se propalen a través de las redes de comunicación serán las que crearàn las nuevas culturas que no necesariamente deben aumentar el conocimiento general sino evitar que estalle la violencia: eso es lo prioritario. A la ciencia le interesa que aumenten los conocimientos generales, pero a las sociedades les interesa que aumente la vida en amor y paz. La religión, el dinero, los militares, la policía, etc. no tendrán màs su narrativa fuerte para detener la violencia y corresponderà a la red global encontrar un equilibrio màs pacifico.

Quizàs sea mejor que muera la cultura como la conocemos dado que no està al paso del avance tecnològico. Una cultura global podría ser màs equilibrada y pacìfica. La narrativa que sobrevivirà entre todas, para formar la nueva cultura, deberá ser una que satisfaga un multiculturalismo.

Te saludo.

Hola,
Me quedé pensando en esto.

El ser humano crea su cultura con la narrativa. Cree lo que le cuentan y lo acepta para formar su comportamiento social y hasta personal.

Digamos que todo se transmite por lo que nos narran. Por ejemplo, me imagino un mono con una banana y yo yendo con mil dólares en contante a pedirle que me cambie su banana por ese dinero. Creo que la reacción del mono será de agresión por querer quitarle su alimento cambiándoselo por papelitos incomestibles. El ser humano es el único estúpido que daría lo que le sirve para su subsistencia por algo inútil. ¿Por qué?

Porque hubo una narrativa previa que explicó que existe un “bien de cambio” que bla, bla, bla. Lo mismo con todo lo que hace a nuestras vidas. La escuela es una distribuidora de las narrativas en varios sectores; incluyendo la historia, aunque a veces confusa. Aprendemos de lo que nos cuentan sin necesidad de verificar ni experimentar. Nuestro comportamiento està regido por todo lo que nos contaron. En base a eso creemos, por ejemplo, que existen los países, los dioses que nos protegen, etc.

La religión nos transmite su narrativa para que todos creamos en lo que nos explica; son cosas incoherentes, pero que creemos correctas. Para que el ser humano actùe de un cierto modo necesita una línea guía que recibe a través de narrativas; por lo que alguien le dijo. No siempre son cosas ciertas ni buenas. Hay veces que se imponen leyes que prohiben ciertas narrativas.

Ese es el modo en que el ser humano prosperò y superò toda especie viva del planeta. Para convivir es necesario que haya una narrativa convincente. Antes fue oral y luego escrita.

Me imagino que en una jauría o manada no podría haber màs de una cierta cantidad de miembros porque sería imposible conocerlos a todos, uno por uno, como para identificarlos y saber si poder confiar o no. Imposible conocer 7 mil millones de individuos, uno por uno, como para saber si confiar o no. El ser humano crea mecanismos para poder confiar en otros aun sin conocerlos y asì convivir pacíficamente. Ese es el secreto de la civilización y de la convivencia.

Para convivir debemos transmitir “modos” para asegurarnos que podemos confiar en extraños sin conocerlos. La religión, el dinero, la policía, la escuela, la política, etc. son elementos fundamentales para convivir con extraños. Hoy también las redes informáticas. Pero debe existir siempre una narrativa que nos convenza que esos elementos son seguros y puedo confiar.

Si las redes informáticas de hoy nos cuentan cosas globales es mejor porque nos abre la mente a nuevas culturas y conociendo otros métodos de convivencia. Nos permite comunicar en otros idiomas diferentes del nuestro que nos hace màs tolerantes, nos abre los ojos a otros modos de pensar y se desarrollan asì nuevos modos de entendimiento.

En fin, la cultura local y nacionalista no sirve màs para la convivencia de tantos miles de millones. No debe desaparecer, pero tampoco impedir que prospere una cultura global. Debe ser una cultura de la humanidad toda.

Saludos.

Nietzscheano escribió:Desde hace días vengo con una idea en mente: con la configuración actual del internet (usuarios, plataformas, emisores de contenido, etcétera) estamos más que nunca sobre expuestos al acceso a la información pero esa sobre exposición no implica un aumento en el conocimiento general de la población. Pienso que una de las razones es la que mencionas, hay mucha basura, pero también, aunque el "trash" no fuese tanto, sería como intentar pasar un monster truck por un túnel exclusivo de livianos, o sea, que no significa que el ser humano absorbe todo lo que contempla.

Cierto hay excesiva información que viene de todos lados. Muchas de ellas inteligentemente manipuladas para vendernos FAKE NEWS o para crear una POSVERDAD.

Por eso debemos ser muy selectivos en cuanto a quien permitimos informarnos. Pueden haber 10 millones de fuentes de noticia distribuidos por el mundo pero yo solo me siento a ver mis dos fuentes únicas: La BBC y The Times. Paso del resto porque aunque no digan todos mentiras, son sensacionalistas y exagerados. Creo que todos deberían también de tener sus propias fuentes aseguradas de confianza e ignorar al resto. En un mundo globalizado en lugar de andar del Timbo al Tambo oyendo cuentos, hay que quedarse con lo confiable.

José Antonio escribió:

Nietzscheano escribió:Desde hace días vengo con una idea en mente: con la configuración actual del internet (usuarios, plataformas, emisores de contenido, etcétera) estamos más que nunca sobre expuestos al acceso a la información pero esa sobre exposición no implica un aumento en el conocimiento general de la población. Pienso que una de las razones es la que mencionas, hay mucha basura, pero también, aunque el "trash" no fuese tanto, sería como intentar pasar un monster truck por un túnel exclusivo de livianos, o sea, que no significa que el ser humano absorbe todo lo que contempla.

Cierto hay excesiva información que viene de todos lados. Muchas de ellas inteligentemente manipuladas para vendernos FAKE NEWS o para crear una POSVERDAD.

Por eso debemos ser muy selectivos en cuanto a quien permitimos informarnos. Pueden haber 10 millones de fuentes de noticia distribuidos por el mundo pero yo solo me siento a ver mis dos fuentes únicas: La BBC y The Times. Paso del resto porque aunque no digan todos mentiras, son sensacionalistas y exagerados. Creo que todos deberían también de tener sus propias fuentes aseguradas de confianza e ignorar al resto. En un mundo globalizado en lugar de andar del Timbo al Tambo oyendo cuentos, hay que quedarse con lo confiable.

Yo por ejemplo desconfío, realmente ignoro por completo, todo lo que venga de Facebook (y demás redes sociales) pues se basan más en la opinión que en un criterio de verdad, o más estrictamente, un criterio de realidad.

Hay una cuestión que la gente no termina de comprender, incluso los mismos medios no terminan de comprender, si bien es cierto un medio informativo debe mantener una línea editorial, debe a la vez ser imparcial. La gente por su lado le exige a los medios que le disparen a todo lo que se mueva y los medios por el suyo eligen que ver con la mirilla. Un medio informativo ecologista no debe avisarnos si hoy va a llover o no, pero tampoco debe hacerse de la vista gorda si un dirigente de alguna ONG ambiental comete algún delito sexual, por poner un ejemplo lamentablemente no tan absurdo.

¿La imparcialidad realmente existe? Lo dudo. Aunque pretendamos serlo, traemos atrás de nosotros miles de enseñanzas que nos han inculcado desde la más tierna edad y ello nos impide ver el panorama con ciertas tendencias mentales.

Ahora, tocando sobre aquello de la muerte de la cultura, no es realmente así, es que la cultura va cambiando, para bien o para mal. La cultura no es un ente pasivo, es un ente activo, que se metamorfoséa -¿palabra inventada?- de acuerdo a lo que la mayoría de una generación cree.