La vida como una peli de mafiosos

Este título no es mío sino copiado del titular de un artículo en un periódico on-laine, pero que me mueve  a la reflexión y se cae en la cuenta de que nuestra vida en la ciudad capitalista se parece mucho a una trama mafiosa, si conocemos por ejemplo, que desde el médico que receta el medicamento que le recomienda el multinacional laboratorio, previa propina, el concejal de urbanismo de cualquier ayuntamiento que cede el permiso de construcción, a la empresa que más mordida le dé, esa misma empresa constructora que esta obligada a contratar de vigilantes de la obra a la pequeña Mafia, si no será saltada y saqueada. El jefe de compras de cualquier empresa que le comprara los productos al proveedor que más propina le dé. El agente antidroga que mira para otro lado por la mordida que le sueltan los narcos, los sobornos a que están sometidos los políticos.

Y esto, una costumbre arraigada como el equipaje obligado de esta sociedad, no tiene color político ni sitio en el mundo, sino que esta tan extendida que ya no se podría entender nuestra sociedad sin esta cadena de sobornos. En la Dictadura se decía que con la Democracia esta serie de cosas no pasarían, pero en estos últimos tiempos hemos conocidos  que desde el rey emérito su yerno, lideres salva patrias como el clan Puyol, partidos que gobernaron muchos años y grandes figuras metidas en la administración, pocos se salvan del mangoneo. La liberación del secreto bancario en Suiza, ha sacado a flotes el agua de cloaca que inundan a casi todos los gobiernos de Europa, y de la que España y sus autonomías no se salva, y aquí va todo en el lote, de las corruptelas la izquierda la derecha, y asociaciones políticas. Dicen que el poder corrompe, pero lo que corrompe es la compra de voluntades bien pagadas

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